sábado, 17 de julio de 2010

Irán


Irán, país de contrastes, montañas, desiertos y clima tropical a las orillas del mar Caspio. Solo puedo decir que la gente es maravillosa, increíble la amabilidad. Nos ofrecen sus casas para dormir, nos dan de comer, solo basta con pararse y en un minuto una familia te ha acogido. Pese a tanta amabilidad, resulta difícil entender que un gobierno tenga al país sometido a una censura a personas tan abiertas respecto a todo, música moderna, pop, rock o música disco. El alcohol tiene que ser vendido en el mercado negro pues está  prohibido. Llas mujeres no pueden lucir el pelo ni ponerse falda. Las playas están separadas para hombres y mujeres y un sinfín de cosas. Ahora estamos en Masuleh,  un pueblo de montaña en el cual nos quedaremos unos 10 días pues mi compañero ha sufrido una caída, haciéndose daño en una rodilla partiendo mas tarde a Teheran para ver la posibilidad de tramitar el visado a Dubay, para de aquí embarcar a India, pues en Pakistan está la cosa fea . Mientras espero su recuperación, me dedico a hacer pistas por unos parajes de montaña alucinantes y ha hacer turismo con unos amigos iranís.

No hay comentarios:

Publicar un comentario